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Consejos para combatir una ola de frío en tu hogar

Las olas de frío suelen llegar casi siempre prácticamente sin avisar, por lo que cuando ocurra, conviene tener en mente algunos consejos que harán de tu casa un hogar en aquellos días en los que el frío se hace insoportable. Estos siete trucos te ayudarán a convertir tu casa en un oasis durante los días más fríos del año:

  • Sácale partido a los radiadores: su mantenimiento es imprescindible a la hora de mantener el calor de tu casa y ahorrar en calefacción. Es necesario purgar los radiadores cada año para que se llenen de agua caliente y aprovechar todos sus beneficios. Además, su colocación también es importante, es preferible situarlos debajo de las ventanas para favorecer la propagación del aire.
  • Mantener la calefacción a 20 grados es la recomendación que ofrece el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía. Porque es una temperatura agradable que no ocasiona un gran choque térmico con la temperatura del exterior. Además, cada grado que se aumenta de temperatura eleva la factura en un 7%, por lo que también es una buena forma de ahorrar.
  • Ventila solo lo necesario: 10 minutos de ventilación al día son más que suficientes para alejar los patógenos y los malos olores de tu hogar. Mantener las ventanas abiertas más tiempo del necesario provocará una pérdida de calor innecesaria y que tu casa tarde más en calentarse, por lo que se encarecerá tu factura.
  • Las cortinas y las alfombras no son elementos meramente decorativos: las cortinas combinadas con una buena ventana se convierten en un gran aislante. Y las alfombras también pueden ser un buen aliado, ya que además de proteger nuestros pies del frío, consiguen mantener el calor de casa, por lo que, además, gracias a ellas podemos ahorrar también en calefacción.
  • Redistribuye tus estanterías: el papel funciona como un aislante contra el frío, por lo que si tienes paredes que dan a la calle, puedes colocar ahí tus estanterías con libros para proteger tu hogar del frío del exterior.
  • La comida, un gran aliado contra el frío: durante los días más gélidos incorpora a tu dieta alimentos calientes, como sopas o cremas, además de legumbres y carbohidratos complejos, como el arroz. También incluye frutas de temporada y cítricas, que te aportarán vitaminas y te hidratarán, reforzando tu sistema inmunológico.
  • Aprovecha el calor de los electrodomésticos: si utilizas el horno, el lavavajillas o te das una ducha, utiliza el calor y el vapor que producen para calentar las estancias de tu casa.

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